La tasación inmobiliaria es un método que se utiliza para determinar el valor de una propiedad. Gracias a este procedimiento es posible establecer un precio justo del inmueble, sin afectar la rentabilidad en la transacción.
Teniendo en cuenta que los compradores basan su búsqueda y decisión de compra según los parámetros de precio, obtener el adecuado es un factor determinante para agilizar y concretar la venta del bien inmueble.
Ahora bien, tasar una propiedad implica ciertos criterios que debes tener en cuenta para fijar un precio adecuado. En este artículo te contamos tres pasos clave para llevar a cabo la tasación inmobiliaria.
Si quieres aprender más sobre cómo hacer una tasación inmobiliaria, mira el siguiente vídeo:
Tabla de contenidos
Efectuar una tasación inmobiliaria conlleva reunir una serie de información relacionada con las características del inmueble y las condiciones del mercado.
Los referentes directos, el valor de reposición y la capitalización son tres criterios a considerar a la hora de realizar una tasación inmobiliaria.
Concretamente, el proceso se compone de tres criterios fundamentales que mencionamos a continuación:
Para determinar el valor del inmueble a vender se toma la referencia de precios de otras propiedades similares. Para una búsqueda efectiva de valores referentes es necesario conocer las características del inmueble como lo son: ubicación, condiciones, metraje y antigüedad.
Enlistar las características descriptivas de la propiedad no solo facilitará la búsqueda de referentes directos. También permitirá identificar otras particularidades que ayuden a insertar la propiedad en el mercado de una manera más competitiva.
Se calcula el precio de construcción del inmueble y también se toma en cuenta la antigüedad. Cabe mencionar que solo se recurre al criterio de reposición cuando en el mercado no existe un bien equivalente con el cual comparar o cuando se pierden los valores de referencia.
La tasación inmobiliaria basada en la capitalización de ingresos se calcula en función de la rentabilidad mensual que produce el alquiler del inmueble.
Este método debe aplicarse cuando el inmueble se emplea como inversión, es decir, una propiedad de la que se espera obtener una rentabilidad. La vivienda habitual no se tomaría en cuenta ya que esta no genera ningún tipo de ingresos sino gastos.
La tasación inmobiliaria debe ser un proceso meticuloso que considere los intereses de comprador y vendedor, así los resultados serán satisfactorios para las partes involucradas.
A continuación, enlistamos tres aspectos fundamentales para llevar a cabo una correcta tasación inmobiliaria:
La ubicación es uno de los principales criterios a la hora de fijar el valor de una propiedad, siendo el factor más importante para los compradores.
El precio del inmueble varía en función de la localización y el estado en el que este se encuentre. Por eso, son dos factores a tomar en cuenta en la tasación inmobiliaria.
¿El inmueble se encuentra ubicado en una zona segura? ¿Cuenta con escuelas e instalaciones comerciales a poca distancia? ¿Posee buena conectividad con la red de autopistas? ¿El vecindario cuenta con la mejor vista? ¿Existen planes de desarrollo urbanístico a futuro en los alrededores?
Si las respuestas son afirmativas, el valor del inmueble será más alto. Mientras que, si la zona residencial cuenta con pocas o ninguna de las características antes mencionadas, el precio de venta será más bajo. Otro factor que influye es el estrato social, que está directamente relacionado con la ubicación.
Además, la condición de la propiedad también es un factor determinante a la hora de calcular la tasación inmobiliaria; el precio final varía en función de su estado.
En ese sentido, es importante conocer si el inmueble es antiguo, si tiene remodelaciones o necesita de algunas reparaciones antes de venderse.
Generalmente, los compradores suelen basar su decisión en análisis comparativos del mercado. Esto significa que toman como referencia algunas ventas cerradas recientemente en diferentes zonas.
El análisis comparativo no solo permite hacer una valoración de precio justa del inmueble. También ayuda al comprador a tomar una decisión informada, disipando posibles dudas para poder realizar una inversión más inteligente.
Hay ciertos aspectos que influyen, en buena medida, en el precio final del inmueble, uno de estos es el tipo de mercado inmobiliario:
En este tipo de mercado, la cantidad de inmuebles es mayor que el número de compradores dispuestos a comprar. Por lo tanto, la estrategia de venta predominante es que se reduzca el costo de las viviendas para atraer el interés del comprador.
En este tipo de mercado ocurre lo contrario, ya que existen más compradores que viviendas disponibles. Es común ver múltiples ofertas que compiten para captar inversionistas o propiedades que se ofrecen por encima del valor real o precio de venta justo.
Este mercado se caracteriza por mostrar un equilibrio entre la oferta de viviendas y la demanda de los compradores.
A la hora de comprar o vender una propiedad, una de las herramientas que permite asignar un precio justo es la tasación inmobiliaria. Mediante un proceso de análisis de las características de la propiedad, este método ayuda a fijar el costo adecuado de un inmueble.
El mercado comparativo, el tipo de mercado inmobiliario, así como la ubicación y el estado, son factores a considerar para realizar la tasación inmobiliaria. No obstante, también es importante contratar un CRM eficiente.
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